lunes, 22 de marzo de 2010

Respuesta de Manuel Melián, concejal por Nueva Canarias en el Ayuntamiento de Santa María de Guía, a la carta abierta del Alcalde, fechada el 24 de Febrero

   Nuevamente, D. Fernando, reacciona como el solo lo sabe hacer, tratando de ocultar una realidad que es evidente: los resultados y los hechos están ahí. Lo hace siempre, no solo tratando de desacreditar al mensajero, sino también echando las culpas de nuestras carencias a los “otros”, a los de fuera del ámbito municipal o, según el caso, también del comarcal.
   
   La realidad, cuando se puede contrastar y ver incluso, es difícil camuflarla con sus argumentos; argumentos que cada vez tienen menos sentido, por manidos y repetitivos. La realidad es, a veces, cruda y, como el tiempo, pone a cada uno en su sitio. Dice un viejo dicho que “el tiempo da y quita razones”.

   Pero no voy a dedicar tiempo a replicar a sus “viejas” retahílas que, a estas alturas, ya nadie le da credibilidad. Cada uno tiene que asumir sus responsabilidades

miércoles, 20 de enero de 2010

El resultado de la última década en Santa María de Guía: la pérdida de una gran oportunidad

    Reflexionando sobre lo acontecido en nuestro municipio en la década pasada, no podemos más que sentir desazón ante la pérdida de una gran oportunidad. La bonanza económica, hoy coronada con una crisis que se veía venir, ha sido desperdiciada por la falta de visión de los regidores municipales.

 La espoleta
  
   La situación de estos resultados viene marcada por la inexplicable decisión tomada por los Alcaldes de la comarca, por unanimidad en la Mancomunidad, apoyando las pretensiones de Froilán, alcalde de Arucas por entonces, de aparcar el arranque de la tan esperada red viaria del norte por su interés en reservar la costa para su expansión urbanística.

   La pretensión de Arucas puede entenderse pero no asumirse por extemporánea, pues el retraso, sin poner sobre la mesa soluciones inmediatas, perjudicó el desarrollo de los municipios de la comarca. No teniendo con esto y ante los varapalos judiciales que impedían el nuevo trazado siguieron empecinados, con el consiguiente retraso. La presión vecinal, aunque callada, y los varapalos judiciales les hizo reflexionar y optaron por el llamado “cuarto carril”, por fin puesto en servicio a finales del 2009 que ha venido a resolver las interminables colas sufridas por los vecinos. Hoy ya no se habla de ellas, del tiempo perdido, del coste económico soportado por los usuarios; es de agradecer que no hayan tenido la osadía de festejar con inauguraciones su apertura, pero echo en falta alguna explicación, alguna disculpa e inclusive alguna dimisión; esperemos que los ciudadanos del noroeste muestren su total rechazo a esta forma de gestionar nuestras carreteras y sancionen con sus votos a los dirigentes políticos que lo permitieron. La Mancomunidad calla, hace bien, todos sabemos quiénes son los responsables. Pero ya hemos perdido la gran oportunidad.